Hay quien dice que la violencia más peligrosa es la que no se ve. Esta frase se ajusta muy bien a la realidad de la pornografía. Después de unos años de divulgación y ayuda a quien ve de manera habitual estos contenidos, el siguiente paso era cuestión de tiempo: crear un lugar para la mujer que sufre, en silencio, esa violencia invisible pero real hacia su propia intimidad: la causada por su pareja adicta. Son las otras víctimas de la pornografía.

Dale Una Vuelta inaugura hoy en su sitio web un amplio espacio dirigido a mujeres que han vivido de cerca la adicción a la pornografía de su pareja. «La finalidad es acompañarla en este momento vital, ayudarla a entender lo que está viviendo y caminar a su lado en este proceso de sanación», según María Contreras, psicóloga y sexóloga, coordinadora de este proyecto.

Tu pornografía, mi dolor

“Llevo un tiempo sintiéndome rara con mi pareja. Algo no encaja. He dejado de sentir esa chispa cuando estoy con él. Lo noto más frío e irritable”. Esta sensación real, descrita por una mujer en el audio inicial cuando uno accede a esta web, es un sentimiento muy común. 

«Muchas de las personas que han descubierto la adicción a la pornografía de su pareja -continúa Maria Contreras- informan los siguientes sintomas: ansiedad, depresión, ira y rabia, pensamientos obsesivos, aislamiento, tensión o falta de concentración. También pueden sentirse incluso culpables de la adicción al porno de su pareja: ¿habré hecho algo mal?»

El número de mujeres que narran estas experiencias no hace más que crecer, y esta plataforma quiere servir de altavoz. «En ocasiones, para una persona descubrir que su pareja tiene una adicción a la pornografia puede suponer un trauma que cause una reacción de estrés agudo y posiblemente síntomas de trastorno de estrés postraumático. Se pueden volver hipervigilantes con su pareja y esto les provoca mucha tensión. Uno de los síntomas que más se repiten es la inseguridad en ellas mismas», concluye Contreras.

Testimonios, foros y espacio personal

Con un diseño amigable y materiales en diversos formatos (infografías, pdf, audios, vídeos e ilustraciones) se busca crear un lugar apacible, en el que cualquier persona pueda dedicar unos minutos a conocerse, reflexionar, entender mejor lo que está ocurriendo en su relación, algo necesario para su propio bienestar.

Este espacio cuenta con varios testimonios reales de mujeres que han atravesado situaciones similares, un foro abierto para que cualquiera que quiera participar pueda sentirse escuchada, un correo de ayuda, y un diario personal con consejos y herramientas útiles de uso cotidiano. 

El proyecto Nosotras se irá desarrollando y ampliando en los próximos meses, con nuevos materiales y mejorando los ya disponibles. Esta primera fase se centra en la mujer víctima del consumo de su pareja, pero “queremos abordar también otras realidades poco conocidas en el mundo de la mujer y la pornografía, como la adicción en el caso de nosotras, que también existe y está muy silenciada, y tiene rasgos diferentes a la adicción del varón”, señala Úrsula Paiva, psicóloga y asesora de esta iniciativa. 

Según avance este proyecto, también se pretende orientar a las jóvenes que han vivido la pornografía en sus relaciones, chicas a quienes el consumo de pornografía ha impactado de forma indirecta en su vida, a través, por ejemplo, de conductas agresivas en sus relaciones sexuales.

Blanca Elía, presidenta de Dale Una Vuelta, con ocasión del 25N, Día internacional de la eliminación de la violencia contra la mujer, es contundente: «somos víctimas indirectas de la adicción al porno, una violencia colateral pero que nos golpea de lleno, un consumo indiviudal produce daños sociales. Queremos lanzar un mensaje de escucha, de comprensión, de perdón y ayuda a tantas mujeres que sufren en silencio». Por ellas. 

 

Más información: www.daleunavuelta.org/nosotras / [email protected]

Coordinadora: María Contreras, psicóloga y sexóloga / [email protected]

Vídeo campaña: https://youtu.be/KqoUwmvHp8U